Hoy, Masia Notari es una hermosa propiedad rural donde los elementos del pasado se combinan con las comodidades de hoy en día. Decoradas con exquisito cuidado y gusto, cada habitación es única.

Actualmente está alquilado a familias, grupos, empresas y organizaciones que, de forma exclusiva, deseen disfrutar de su estancia en un lugar de singular belleza, donde poder celebrar reuniones, retiros, funciones, estancias y vacaciones.

Según la época del año, Masia Notari se puede alquilar a partir de dos días, siempre con alojamiento incluido. El alquiler mínimo es de 14 habitaciones (máx. 28 personas) y se puede ampliar hasta 25 habitaciones.

Ofrecemos increíbles espacios exteriores, porches cubiertos y una piscina de agua salada de 16m2.

No debemos olvidar nuestro magnífico e incomparable tesoro, la bodega. Totalmente restaurada y manteniendo sus elementos originales, ofrece 450m2 de cálida piedra cargados de historia.

Historia

Las primeras referencias documentadas de Masía Notari datan de 1452, aunque como fecha de construcción se refiere a 1545. Durante siglos, esta Masía fue propiedad de una misma saga familiar, la familia Alegret. A finales del siglo XVIII la última heredera, Magdalena Alegret contrajo matrimonio con el Sr. Josep Anton Martí, de oficio, notario, quien impulsó gran parte de las reformas que todavía hoy se aprecian.

A finales del siglo XIX la Masía fue adquirida por el famoso pintor local Jaume Ferrer i Mascaró, quien la convirtió en su taller y residencia.

Todavía hoy, nuestra Masía es conocida por esa referencia e incluso ha dado nombre a un nuevo sector de la ciudad construido, en parte, en los terrenos de la propiedad original.